El 2012 ha sido para Rumania un año electoral. En junio se celebraron las elecciones locales y el próximo día 9 de diciembre tienen lugar las elecciones parlamentarias. Durante este año los políticos han centrado sus esfuerzos en las campañas electorales, en lograr que los ciudadanos acudan a votar, más que en convencerles de sus programas y promesas electorales, relata hispatriados.com.

Los rumanos, al igual que en muchos otros países, han perdido la confianza en la clase política salpicada de escándalos de corrupción y más preocupada por su imagen pública que por el interés ciudadano. La pérdida de confianza viene dada por la falta de compromiso político en la resolución de problemas sociales que afectan al electorado sobre todo en este momento de inestabilidad económica y social.

Los ciudadanos no se sienten representados por sus candidatos, no confían en sus políticos, lo cual acaba por determinarles a no acudir a las urnas y no ejercer su derecho al voto. A lo largo del año, en paralelo a la campaña electoral, ha discurrido otro tipo de campaña que ha pasado desapercibida en los medios, de la que se ha sabido por el boca a boca o a través de las redes sociales.

Una campaña organizada por ciudadanos y por miembros de la sociedad civil, llena de iniciativas participativas destinadas a informar a los ciudadanos sobre programas, candidatos políticos, voto responsable y sobre todo para implicarlos activamente en el proceso democrático más allá de simplemente acudir a las urnas.

La mayoría de estas iniciativas no tienen previsto desaparecer después de las elecciones y para ello ya han establecido formas para continuar su labor de implicación ciudadana. En este artículo recopilamos las iniciativas más destacadas con el objetivo de asomarnos al otro lado y ver las elecciones desde otra perspectiva.

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