Las potencias europeas, decididas a combatir la evasión fiscal en el continente, lograron este sábado que más países se sumaran a la cruzada, aunque no lograron que Austria cediera en levantar el secreto bancario. Durante los dos días de reuniones en Dublín de ministros europeos, Polonia, Holanda, Bélgica y Rumania se unieron al combate contra la evasión fiscal y los paraísos fiscales que iniciaron España, Francia, Alemania, Reino Unido e Italia.
"La voluntad del Gobierno español es luchar con todas sus fuerzas contra el fraude fiscal y uno de los instrumentos fundamentales es la cooperación con el resto de países", dijo el ministro español, Luis De Guindos. "En momentos de dificultad, se debe actuar dando un claro mensaje", añadió. Este movimiento "se tiene que extender más allá", dijo.
El viernes seis países (España, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Polonia) se alinearon en un frente común para combatir el secreto bancario en Europa, que sus ministros de Finanzas escenificaron en una conferencia de prensa. "Creemos que hay un 'momentum' ahora (...), cuando seis países se unen, esto envía una clara señal", señaló el ministro francés, Pierre Moscovici.
La lucha contra la evasión fiscal es tan importante para los países europeos que se incluyó en la agenda de la próxima cumbre de la Unión Europea, en mayo.
La Comisión Europea estimó que este problema le cuesta al continente un billón de euros anuales, el equivalente al Producto Interior Bruto (PIB) de España. Las potencias europeas quieren que la UE cuente con una legislación equivalente a la FATCA (Foreign Account Tax Compliance Act) de Estados Unidos, una regulación muy estricta que obliga a los bancos a dar información sobre las cuentas de titulares estadounidenses.
El 'momentum' creció tras la divulgación de los 'Offshoreleaks', una filtración masiva de mill