En la Montaña Roja, Rosia Montana, como se la conoce en Rumanía, se encuentra el mayor depósito de oro de Europa. Calin Pal nos lleva a su interior. Debido a la crisis económica, el precio del oro está por las nubes. Empresas internacionales tienen proyectos para abrir nuevas minas en España, Portugal, Eslovaquia, Grecia, Irlanda del Norte y Rumanía, relata Euronews.
El proyecto de la Rosia Montana está entre los más controvertidos, debido a su envergadura, al impacto en el medio ambiente, y a los elementos arqueológicos de tiempos de los romanos hallados en esta mina histórica, de hace 2.000 años.
Calin es el jefe del equipo. Comprueba cómo avanzan los trabajos de conservación en la parte protegida del lugar, peforado con galerías que excavaron sus ancestros, los romanos. “Hubo al menos tres generaciones de mineros antes que yo: mi bisabuelo, mi abuelo, mi padre… Y mi esperanza es que las próximas diez generaciones sigan trabajando aquí, en la mina.”
La mayoría de los habitantes de la zona comparten este punto de vista. Quieren que el inversor, canadiense, empiece a excavar. Pero los que se oponen alertan que se destruirá la mayoría de las galerías romanas. Para relajar tensiones, “Gold Corporation” invierte millones de euros en transformar al menos una parte de las galerías romanas en un museo. Aquí trabajan arqueólogos de toda Europa, como Robert Horvath. “La principal información es la forma de la galería. Cuando es geométrica, sabemos que es de tiempos de los romanos. Y encontramos escaleras de madera, del tipo de la época, y huecos para la iluminación. Sabemos que los mineros medievales no utilizaban este tipo de formas.”
El equipo de Calin retira los materiales que se han ido acumulando durante años, para que Robert, rumano, y Xavier, español, puedan trazar el mapa de las históricas galerías. “Aquí, en estas minas ro