Turquía afronta el partido contra Rumanía en Estambul como una cita clave para acercarse a la segunda plaza del Grupo D europeo que le permitiría jugar la repesca para acceder a la Copa del Mundo de Brasil 2014, cuenta Univisión, citando a EFE.
Rumanía es líder del grupo con dos victorias, empatada a seis puntos con Holanda, mientras que la selección turca acumula tres puntos, los logrados con su victoria contra Estonia.
Ese triunfo no palió la derrota por 2-0 contra Holanda días antes, y el equipo turco necesita ganar mañana para tener opciones al segundo puesto y ganar confianza para el partido contra Hungría del próximo martes.
El entrenador, Abdullah Avci, ha formado el equipo con mayoría de jugadores de los dos clubes más fuertes de Turquía, el Fenerbahçe y el Galatasaray, aunque también están presentes dos jugadores del Atlético de Madrid, Arda Turan y Emre Belözoglu.
"Este mes vamos a traspasar el umbral y hacer felices a 50.000 seguidores", prometió Avci, en referencia a la capacidad del estadio Sükrü Saracoglu de Estambul, donde se jugará el partido.
Subrayó la ventaja de jugar en casa, pero admitió que se espera "una competición muy dura", al tiempo que confió en el fútbol de la "joven generación de jugadores" que compone la selección.
"Hemos analizado muy bien el juego de Rumanía y de Hungría, hemos hecho un seguimiento a todos sus partidos de la última época", señaló el entrenador, confiando en que el partido mañana no depare sorpresas.
Por su parte, Rumanía visita Estambul después de dos victorias contra las modestas Estonia y Andorra, y dispuesta a seguir sumando para continuar bien posicionada en la carrera de clasificación.
Los rumanos son líderes de grupo después de mucho tiempo, y, pese a la poca entidad de sus dos primeros rivales, sus aficionados parecen entre